Monday, March 5, 2007

Para seguir pensando: Bullying - Amedrentamiento

En este nuevo mensaje quiero que pensemos juntas/os el por qué las/los profesionales de la salud estamos urgidas/os a ocuparnos de este tema. Más allá de la importancia de evitar padecimiento a las niñas/os que la experimentan, es fuente de alteraciones de la salud. En relación con este aspecto les dejo estos aportes que considero de interés compartir:

BULLYING: SUS CONSECUENCIAS Bullying y problemas de salud Un número considerable de trabajos científicos destacan la relación entre aparición de enfermedades y alteraciones de la salud en niñas/os y adolescentes que experimentan la sensación de hostigamiento en el ámbito escolar

EL BULLYING (AMEDRENTAMIENTO, HOSTIGAMIENTO ENTRE PARES) SE ASOCIA A ALTERACIONES DE LA SALUD

Un número considerable de trabajos científicos destacan la relación entre aparición de enfermedades y alteraciones de la salud en niñas/os y adolescentes que experimentan la sensación de hostigamiento en el ámbito escolar; sin embargo, la pregunta de las/los investigadores ha sido y es cuál de esos factores aparece primero.



Investigadores de diversas instituciones académicas de los Países Bajos analizaron los comportamientos del alumnado de un total de 18 escuelas durante un período de seis meses, en un total de 1118 alumnas/os entre 9-11 años de edad.


Se analizaron las respuestas a un cuestionario que contenía preguntas acerca de manifestaciones de depresión, ansiedad, dolores de cabeza, trastornos del sueño y del apetito, dolor abdominal o sensación de cansancio.


Las conclusiones de estudio demostraron que las/los niñas/os que padecen el hostigamiento y el denominado "bullying", tienen mayor predisposición a presentar problemas de orden emocional que comprometen al cuerpo. Los autores enfatizan la existencia de numerosos problemas relacionados con la salud y la integridad emocional que siguen a episodios de bullying en la escuela, y esto es elemento suficiente para que los profesionales que están en contacto con niñas/os y adolescentes comiencen a visualizarlo como problema.


Otro dato de interés evidenciado en las investigaciones fue que la depresión y la ansiedad que sienten algunas/os niñas/os y adolescentes connlleva el riesgo aumentado de ser víctimas de bullying y se mantiene de este modo el estado de malestar y de sufrimiento.


Se sugiere que de uno u otro modo, independientemente de cuál sea primero, se promueva en las/los niñas/los la progresiva incoporación de recursos que les permita ir superando estas dificultades a fin de sentir-se menos vulnerables a los comportamientos o actitudes que incluyen el hostigamiento.



Fuente PEDIATRICS Vol. 117 No. 5 May 2006, pp. 1568-1574